Les proponemos un pequeño juego: ¿recuerdan aquellos libros que solíamos leer cuando éramos pequeños en los que podíamos decidir qué camino seguiría el personaje principal? Imaginemos que nuestro protagonista es ahora un grupo de música y llamémosle Viva Suecia.
En un mundo en el que las estanterías están a rebosar de historias de bandas que han alcanzado el éxito, nosotros nos quedamos con la trayectoria que se han marcado estos murcianos: un inicio puro y sin artificios.
Y es que no todo siempre fue como se puede observar a simple vista. Llenar salas no siempre fue la tónica, y labrarse el éxito con el que ahora cuenta la banda ha sido el fruto de muchísimo esfuerzo y trabajo… pero todo llega (y nosotros no nos lo queríamos perder).
Viva Suecia saltó al escenario de la sala lagunera con fuerza. La expectación se palpaba en el ambiente, y estaba más que justificada al ser la primera vez que el grupo actuaba en la isla. Este hecho propició que su repertorio se inclinase más por hacer repaso de su primer trabajo discográfico, priorizándolo respecto a Otros Principio Fundamentales.
El pistoletazo de salida lo dieron con Hasta Ahora y el ritmo regular de la batería empezó a poner a tono al público que se entregó in crescendo de principio a fin. Continuaron con Nadie Te Devolverá el Favor, seguido de El Nudo y la Esperanza. El primer acercamiento al segundo álbum de Viva Suecia fue una auténtica delicia para los asistentes, que se dejaron la voz al reconocer los acordes de su nuevo trabajo.
Aunque, desde un principio pudo sentirse la energía que el grupo desprendía, nosotros consideramos que ¿Nos ponemos con esto?, Los Años y la genial Acabaremos Muriendo en Ello fueron el verdadero arranque de un concierto que ya nunca bajaría en lo que a ritmo se refiere.
Los últimos minutos de concierto fueron el momento clave en el que público y artista parecían fusionarse en un sólo ser. Los murcianos arrancaron con el característico punteo de A Dónde Ir, encadenando a su fin Piedad y Permiso o Perdón, la mejor antesala para la guinda del concierto: la sala entera coreando sin parar Bien por Ti y Hemos Ganado Tiempo, tema con el que cerraron su actuación.
Nuestra primera vez con Viva Suecia fue una experiencia inolvidable. No podemos negar que pudimos ser testigos de un concierto que contó con una ejecución perfecta, una presencia inmejorable en el escenario y la certeza de que cuando un grupo da lo mejor de sí mismo los resultados son para enmarcar.
Pocas bandas pueden afirmar que, con únicamente dos álbumes a sus espaldas, sean claros referentes musicales en su país. Pero es que ya lo adelantábamos al inicio de esta crónica, el camino de Viva Suecia es de esos libros que da gusto leerse.