Phe Festival 2019 (Viernes)

Puerto de la Cruz
(Tenerife)

Ser un entendido en esto de los festivales es algo que se nota, y si no que se lo digan al que se ha consolidado como el festival más importante del panorama indie-español en Canarias. 

Son muchos los factores que contribuyen a su éxito: el respaldo de un público que se mantiene fiel al formato, el apoyo de una institución que siempre está al pie del cañón (como lo es el Ayuntamiento del Puerto de la Cruz) y un equipo de organización que se supera con creces en cada edición.

Phe Festival nos dejó, sin proponérselo, el que sería uno de los recuerdos a los que con más asiduidad acudiríamos en busca de la tan ansiada normalidad en la vida del festivalero. 

La primera jornada arrancó con producto local. El Extranjero (ganador de LALAcore 2018 en la categoría “URBANA”) fue el encargado de dar el pistoletazo de salida, seguido de los británicos The Statue Thieves

Cantarle al amor desde la más absoluta desgana es un auténtico arte y Cariño son nuestras reinas. Nunca le habíamos estado tan agradecidos a Tinder por haber juntado a estas madrileñas, que nos hicieron revivir aquella época en la que el resultado del test de la Super Pop era nuestra mayor preocupación. 

Los veteranos Arizona Baby nos transportaron a la América más profunda con un directazo para el recuerdo. Los vallisoletanos se dejaron la piel en el escenario y nosotros la voz con ellos.

El mejor ejemplo de que en un pedacito de tierra se puede encontrar un talento gigante son Locoplaya. Estos herreños han revolucionado el panorama musical español dándole al rap ese rollito canario que tanto gusta.

Hay directos y directos, y el de Depedro no deja indiferente a nadie. La presentación de su disco “Todo va a salir bien” se nos quedó grabado a fuego como un mantra que arde y cura a partes iguales. 

Quién mejor que Los Punsetes para poner el punto final a la primera jornada del Phe Festival 2019. Los reyes del indie español nos deleitaron con sus letras convertidas ya en himnos generacionales. 

Phe Festival 2019 (Sábado)

Puerto de la Cruz
(Tenerife)

Tras una jornada en la que creíamos que el Phe Festival había dado lo mejor de sí, nos topamos de lleno con un cierre de festival digno de película.

Al igual que el día anterior, arrancamos con acento canario. En esta ocasión, la banda ganadora de LALAcore 2018 en la categoría “GENERAL” Not a Number, nos hizo disfrutar de su sonido experimental y una puesta en escena muy lograda para ser su primera actuación en un gran escenario. 

Cuando es necesario aplicar quinientas etiquetas para catalogar tu estilo de musical, es porque estás innovando, y si no que se lo digan a Gaf y la Estrella de la MuerteEste grupo canario nos dejó impactados con su originalidad, más propia de otros mundos que de nuestro planeta.

A nosotros no nos mató un camión, y gracias al cielo. Poder disfrutar de este directazo de Angel Stanich fue uno de los regalos de la noche. Nadie como él para atraparnos con esas melodías que, a más de uno, le continúan resonando en la cabeza.

Si pudiésemos repetir un momento del festival en bucle, sin duda alguna nos quedaríamos con este pedazo de actuación de Delaporte. Una puesta en escena impecable, unos ritmos que no pasaron desapercibidos para nadie y unas voces que te transportaban a un lugar en el que todo valía la pena. 

Un festival de verano que se precie no podía dejar de contar con el grupo revelación del año, Carolina Durante. ¿Que nos dejamos la voz cantando? Sí. ¿Que no paramos de saltar durante todo el concierto? Sin duda alguna. ¿Que más de un asistente se habrá dado por aludido al corear “Cayetano”? También. 

Mueveloreina lo tiene claro, hacer canciones con carga ideológica no entra en conflicto con hacer que éstas sean lo más pegadizas posible. Lo que ellos mismo denominan estilo “electrapical” fue la guinda de la noche.

El punto final se acercaba, y la apuesta del Phe Festival fue la banda neoyorquina We are Scientist. Después de quince años haciendo canciones pegadizas, nos mostraron su faceta más indie. Y vaya si nos gustó.

Sin duda alguna, los phelovers de esta edición recordarán este festival como uno de los momentos más destacados del verano. 

Lejos quedan ya aquellos momentos en los que saltar en masa y abrazarnos sin control era nuestra verdadera normalidad. Ahora sólo queda esperar, respirar hondo y volver con más fuerza.